Tiempo para…
La pereza física, la siesta interminable, el pan amasado a la hora de once, la palmera con arena, cortar o dejar crecer el pelo, cambiar los hábitos de higiene, conocer nuevos lugares, disfrutar de los atardeceres,las caminatas nocturnas, visitar a los amigos y la familia, arreglar el closet, leer lo que nos espera amontonado en el escritorio, ver buenas y malas películas, comer porotos granados con tomate y albahaca, disfrutar del olor que derraman las sandias, tomar melón con vino, caminar sobre el pasto húmedo, aburrirse de no hacer nada… sentir que se es dueño del tiempo.
La pereza física, la siesta interminable, el pan amasado a la hora de once, la palmera con arena, cortar o dejar crecer el pelo, cambiar los hábitos de higiene, conocer nuevos lugares, disfrutar de los atardeceres,las caminatas nocturnas, visitar a los amigos y la familia, arreglar el closet, leer lo que nos espera amontonado en el escritorio, ver buenas y malas películas, comer porotos granados con tomate y albahaca, disfrutar del olor que derraman las sandias, tomar melón con vino, caminar sobre el pasto húmedo, aburrirse de no hacer nada… sentir que se es dueño del tiempo.
4 comentarios:
holaa amiga!!
uff el verano, arma de doble filo para los pajeros como yo..jaja
cuidate harto!
así es estimado Juanjo
Me gustó lo espontáneo.Eso que hace falta...
Me dio hasta hambre ver esos porotitos y la ensalada!!
Qué envidia, creo que por segundo año consecutivo no tendré vacaciones.
Eso no me impide vivir las sensaciones que describes. Y hay muchas más!! Hoy fui a andar en bote a la laguna artificial del Parque Intercomunal... bueno, esas cosas sólo se hacen en verano.
Y la cantidad de frutas, jugos, helados y platos como humitas que uno come se quintuplican.
Es rico el verano.... pero no en Santiasco.
Publicar un comentario