miércoles, 18 de junio de 2008

Mi madre


Suena el teléfono y el visor dice mamá. Contesto y ella dice Carolita. Me asusto. No puedo evitarlo, desde que dejé Santiago, nadie me dice así. Durante toda la conversación espero que me de la noticia fatal. No hay tal noticia. Suspiro aliviada. Pregunta cómo va todo, cómo está el perro, las tortugas y el trabajo. Me da noticias de un Santiago ausente, donde la lluvia cae sin parar.
Al despedirme le digo Te quiero mamá.

1 comentario:

Neni dijo...

Amiga, me gusta tanto este posteo. Parece un cuento. Deberías incluirlo en tu libro de cuentos.
Me llega al alma, porque he tenido ese mismo sentimiento muchas veces.
Te quiero mucho, amiga de mi corazón. Un abrazo de oso.