Hace un mes estaba en San Pedro almorzando con Mercedes y Lucas, disfrutaba del viento de las tardes, esperaba que la lluvia cayera y sonara contra el techo de zinc. Despedíamos a los que partían sin rumbo conocido y dábamos la bienvenida a los que se incorporaban al Jurike. Estuve 18 días en un Hostal, disfrutando de la calma del desierto y las puestas de sol a media tarde.
Hoy estoy en Santiago, en ese tiempo no pensaba salir de la casa de mis padres y menos vivir en el centro. Camino por Lira, San Isidro y vuelvo a ser más joven, revivo las caminatas universitarias, mis pasos se cruzan con los de mis profesores, ellos van a su casa y yo a la mía. El retorno es inminente, me siento parte del barrio.
El pan sabe como en casa. No hay tiempo para la pena y menos para la nostalgia.
4 comentarios:
pase por aca de casualidad, sin mayores espectativas....que lindo es encontrar personas con tanta sensiblidad, me encanto tu blog pq constantemente mencionas a tus amigos, algunos de viaje otros perdidos...nunca pierdas las ganas de hablar de ellos y contar sus historias pq eso finalmente habla de ti, te describe y te muestra.(me encantaria ver fotos tuya con ellos)
hola miss =D!!
me gusto su blog :)!
pasaba para dejar mi saludo.
besos y cariños
some.
Carolita Amiga, me dio paja loguearme con mi cuenta de blogger, pero aquí estoy... visitando parareinasdeotrasfomedades. :D
Ya sabe mi opinión sobre haber dejado el nido, la congraTULO. Y tranquila, que la peor parte ya pasará. ;)
¡Saludos!
Estimadisima amiga
es hora q ponga al día su lenteja blog parareinasdeotrosbostezos
actualiza po!
jajaja
cuidate carolilla , estamos al habla fuerza ..q siempre he creido en ti
chao amiga
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